martes, 29 de junio de 2010

A 8 años de los asesinatos de Kosteki y Santillán

El sábado 26-06-10, alrededor de 10000 personas marchamos desde la Estación Avellaneda hasta el Puente Pueyrredón, en recuerdo del octavo aniversario del asesinato de los compañeros Kosteki y Darío Santillán. Participaron de la movilización el MUP, La Cámpora, el Mov. Evita, el Comedor Los Pibes, la Tupác Amaru, el secretario gral. del sindicato de los canillitas (CGT), Omar Plaini, el legislador porteño Tito Nenna y el MTD Aníbal Verón organización a la que pertenecían los compañeros asesinados por la mafia de la Policía Bonaerense.
Una de las consignas del acto fue "Clarín: la crisis no causó dos nuevas muertes, fue la represión que ordenaron Duhalde y Solá". Recordemos que Clarín y la gran mayoría de los medios dijeron en un principio que "las muertes fueron producto de una interna piquetera", versión que fue luego desechada ante la imágenes que se puedieron ver por TV. Fue Duhalde el que ordenó reprimir brutalmente aquella gran movilización preparada con varios días de anticipación por los movimientos sociales, que representaban a los sectores más castigados y excluídos de la sociedad, producto del modelo neoliberal de saqueo y entrega nacional que hizo crisis en diciembre de 2001.
Es el mismo "Cabezón"el que hoy aparece dandonos clases de "democracia", presentándose ante los sectores dominantes como la única garantía para defender sus intereses y el "orden social" de los "bárbaros pingüinos" que quieren "llevarse todo por delante". Justamente Clarín y companía, que junto a políticos perimidos como Duhalde y Solá salieron el año pasado a repudiar la nueva Ley de Medios Audiovisuales, defendiendo una "libertad de prensa" que es inexistente en los hechos. Este bloque de poder reaccionario es el que pretende volver a imponer desde el 2011 en adelante, el modelo de exclusión y dependencia imperial, en desmedro del modelo de inclusión social, producción y desarrollo nacional inaugurado en 2003 por los Kirchner y que para seguir consolidándose debe ser profundizado para seguir mejorando la calidad de vida de la gran mayoría de nuestra población. Por eso lucharon y murieron Maxi y Darío. Por eso hay que honrar su memoria.















domingo, 20 de junio de 2010

PROMESA DE LEALTAD A LABANDERA NACIONAL ARGENTINA

Esta es la bandera que creó Manuel Belgrano en los despertares de nuestra libertad. Simboliza a la Republica Argentina, nuestra Patria. Es el símbolo de los valores que nuestros próceres defendieron y promovieron con sus luchas y sacrificios, triunfos y derrotas. Esos valores son los de la libertad, la tolerancia, la justicia, la igualdad, la paz y la solidaridad. Es el sentido de nuestra libre soberanía, que hace sagrados a los hombres y mujeres y a todos los pueblos del mundo. Convoca al ejercicio de nuestros deberes y nuestros derechos, a respetar las leyes y las instituciones. Es la expresión de nuestra historia forjada con la esperanza y el esfuerzo de millones de hombres y mujeres, los que nacieron en nuestra tierra y los que vinieron a poblarla al amparo de nuestra Bandera y nuestra Constitución.Representa nuestra tierra y nuestros mares, nuestros ríos y bosques, nuestros llanos y montañas, el esfuerzo de sus habitantes, sus sueños y realizaciones.Simboliza nuestro presente, en el que, día a día, debemos construir la democracia que nos ennoblece y conquistar el conocimiento que nos libera, y nuestro futuro, el de nuestros hijos y el de las sucesivas generaciones de argentinos. Es el símbolo que con sus colores celeste y blanco nos identifica como argentinos ante el mundo.
Alumnos:¿Prometen defenderla, respetarla y amarla, con fraterna tolerancia y respeto, estudiando con firme voluntad, comprometiéndose a ser ciudadanos libres y justos, aceptando solidariamente en sus diferencias a todos los que pueblan nuestro suelo y transmitiendo, en todos y cada uno de nuestros actos, sus valores permanentes e irrenunciables?
¡SI PROMETO!

miércoles, 16 de junio de 2010

16 de junio de 1955, el día en que Bs. As. se tiñó de sangre

En medio de un ambiente político muy tenso y conflictivo, que incluían graves enfrentamientos entre la Iglesia Católica con el gobierno popular y constitucional del General Juan Domingo Perón, el 16 de junio del 55' un avión de combate de la Fuerza Aérea sobrevolaría la Catedral Metropolitana para rendir homenaje al General San Martín, cuya memoria había quedado ultrajada por la marcha del Corpus Christi. El mal tiempo amenazaba con hacer suspender al desfile aéreo.
El General Lucero, Ministro de Guerra, dió la novedad de la sublevación de la Armada Argentina. Entre informaciones y contrainformaciones que se sucedieron en la madrugada del 16 de junio, por la mañana de ese día se informaba que se había levantado la ESMA y que en Ezeiza algo turbio había ocurrido. Ante éstas informaciones de que un golpe de Estado estaba en marcha, Juan Perón se traslada inmediatamente hasta el Ministerio de Guerra, delegándole al General Lucero la responsabilidad de aplastar a la rebelión gorila.
La Marina, junto con algunos politicos opositores recalcitrantes como por ej: Zavala Ortíz (UCR) pretendían asesinar al Presidente Perón creyendo que así se desmoronaría todo el gobierno. Ante la caída de las primeras bombas, Juan Perón se retira al sótano del Ministerio de Guerra, siguiendo desde allí los trágicos acontecimientos. Perón no quería que ante los bombardeos salvajes que estaban llevando adelante los aviadores navales, los peronistas se trasladasen masivamente al lugar de los hechos, cosa que finalmente ocurrió. Miles de obreros nucleados en la CGT salieron a la calle "a dar la vida por Perón", marchando hasta la Plaza de Mayo con palos y algunas pocas armas robadas en armerías del microcentro porteño. Perón quería evitar un baño de sangre más grande todavía del que se estaba produjendo.
La base principal de los sublevados de la Armada se encontraba en Punta Indio (Pcia. de Bs.As.), desde donde partían los aviones que ametrallaron y bombardearon la ciudad, matando a casi 500 personas y dejando heridas a otras 2000, para luego refugiarse en la ciudad uruguaya de Montevideo. La saña y brutalidad de los aviadores navales fue total, transformando a la ciudad de Bs. As. en un escenario de guerra y muerte, en donde civiles, militares, hombres, mujeres, niños y ancianos, peronistas, antiperonistas, católicos, judíos, musulmanes y ateos, todos fueron víctimas del odio genocida de ésos uniformados que utilizaron armas y bienes del Estado Nacional, para masacrar a su propia población, cuyo objetivo era asesinar a Perón y dar un Golpe de Estado, que se postergaría por sólo tres meses. En la tarde del 16 de junio, el Ministerio de Marina se encontraba rodeado por una muchedumbre enardecida de peronistas que querían linchar y ajusticiar a los responsables de tamaña matanza, en donde los sublevados terminaron pactando su rendición ante los altos oficiales del Ejército Argentino para salvar sus vidas de una muerte segura. Sólo el Vicealmirante de Infantería de Marina, Benjamín Gargiulo decidió suicidarse, ya que creía sería fusilado por el Gobierno de Juan D. Perón ante semejante atrocidades cometidas, cosa que finalmente no sucedió con otros jefes golpistas ante un exceso de humanidad que tuvo el General Perón con esos criminales de lesa Patria. Tres meses después del 16 de junio, el gobierno popular y nacionalista del General Perón fue finalmente derrocado, enviando a éste a un larguísimo exilio que duró 18 años. El 16 de junio de 1955 fue el comienzo de un hito en las prácticas de la violencia oligárquica y represiva en la historia Argentina del siglo XX, que en el futuro se repetiría de manera recurrente y brutal.

Eduardo N. Canosa

Secretario General de Capital Dario Arguello 15-6881-7924

lunes, 14 de junio de 2010

El MUP CAPITAL ,repudiamos las acusaciones de Duhalde

Ante las versiones periodísticas que indican que el ex senador Eduardo Duhalde fue víctima de amenazas, a través de un grupo de Facebook vinculado de alguna manera con el Movimiento de Unidad Popular, queremos negar enfáticamente que el MUP haya realizado estas supuestas amenazas.

Entendemos que el doctor Duhalde sufre en estos momentos el dolor de ya no ser en política, y que esta frustración, puede llevarlo a verter semejantes acusaciones en pos de victimizarse.

El Movimiento de Unidad Popular quiere expresarle al Dr. Duhalde que tememos la firme convicción de que la batalla política se realiza dentro de la democracia, en la disputa de ideas y en la confrontación electoral. No pensamos ni recurrimos a los métodos que él puso en práctica el 26 de junio del año 2002, cuando sus funcionarios alentaron públicamente a una masacre que terminó con el fusilamiento por la espalda de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki.

Para el Movimiento de Unidad Popular el camino de la justicia es el que nos enseñaron las Madres de Plaza de Mayo que pese a haber sido víctimas del asesinato de sus hijos siempre reclamaron justicia y no venganza.

Le solicitamos enérgicamente al Dr. Duhalde que retire las acusaciones vertidas, que se retracte, y que no busque ensuciar el accionar político del Movimiento de Unidad Popular, fuerza orgánica del Frente para la Victoria, que tiene como máxima aspiración la construcción de una Argentina justa, libre y soberana.

Secretario General Capital Dario Arguello
Cel: 15-6881-7924


lunes, 7 de junio de 2010

A 54 años de la Masacre de 1956

Un 9 de junio de 1956 un grupo de militares y civiles patriotas y peronistas comenzaron un levantamiento armado contra la dictadura cívico-militar comandada por el general Pedro Eugenio Aramburu y el almirante Francisco Isaac Rojas, denominada "Revolución Libertadora".
El clima de supuesto consenso que rodeaba a dicho régimen dictatorial y oligárquico empezó a trastocarse con la remoción del General Eduardo Lonardi al mando de la misma en noviembre de 1955. El "ni vencedores ni vencidos" que éste último había proclamado a la sociedad fue reemplazado por una represión brutal y sangrienta contra todo lo que oliera al "régimen depuesto" el 16 de septiembre de 1955. El Partido Peronista fue disuelto, la CGT intervenida, sus delegados y dirigentes presos y torturados, al igual que milies y miles de obreros. La Fundación Eva Perón fue virtualmente desmantelada y destruida, y el cadáver de la Abanderada de los Humildes secuestrado de la CGT por un comando militar. La represión, la desnacionalización de la economía y la vuelta a los estamentos más altos del gobierno de personajes de la oligarquía y de "argentinos" asociados a corporaciones extranjeras, un hecho trágico.
Ante tanta ignominia y con el General Juan D. Perón exiliado forzozamente, el General Juan José Valle se convirtió en el jefe del movimiento nacional en operaciones. La dictadura "Libertadora" de Aramburu y Rojas conocía gran parte del plan de levantamiento armado a través de sus servicios de inteligencia, que debía comenzar con una proclama radial del General Valle la noche del 9 de junio.
El fracaso del improvisado putchs trajo como consecuencias trágicas el fusilamiento y asesinato de obreros en José L. Suárez y de militares en Lanús, La Plata, Campo de Mayo previa sanción de la ley marcial por la dictadura militar oligarco-imperialista. El General Juan José Valle, ante la dramática situación, decide entregarse para parar las matanzas con la promesa que se le respetará su vida. Pero como los dictadores al servicio de intereses imperiales no tienen palabra ni códigos éticos, por decreto de Aramburu-Rojas (el dúo sangriento) el General del Pueblo (Valle) es fusilado el 12 de junio de 1956 en la antigua Penitenciaría de la calle Las Heras, ante el ruego desesperado de la esposa e hija del patriota e infortunado General que entregó su vida a la causa de la democracia para el pueblo y por el regreso del General Perón a su patria.

General de División Juan José Valle, Teniente Coronel José A. Yrigoyen, Teniente Coronel Oscar Lorenzo Cogorno, Coronel Eduardo Cortínez, Coronel Ricardo Ibazeta, Capitán Néstor Cano, Capitán Jorge Costales, Capitán Eloy Caro, Dante Hipólito Lugo, Clemente Ross, Norberto Ross, Osvaldo Albedro, Carlos A. Lizaso, Nicolás Carranza, Francisco Garibotti, Mario Brión, Vicente Rodríguez, Teniente de banda Néstor Videla, Teniente 1º Jorge L. Noriega, Sargento Hugo Quiroga, Suboficial principal Miguel Angel Paolini, Suboficial principal Ernesto Garecca, Cabo músico José M. Rodríguez, Sargento músico Luciano Rojas, Sargento ayudante Isauro Costa, Sargento carpintero Luis Pugnetti, Subteniente de Res. Alberto Juan Abadíe.
¡PRESENTES!

Eduardo N. Canosa